“Por si has tenido un mal día”  fue creado  para los que creen que ya no puede pasarles nada peor y quieren pasar un rato agradable leyendo las tonterías que me pasan a mí…que no son pocas; Para aquellos que atraviesan situaciones en las que ven  el vaso medio vacío pero  en realidad no son más que nimiedades carentes de importancia,  instantes efímeros de los que uno se puede reír más tarde o más temprano.
Mi filosofía de vida me dice que todo en la vida tiene solución y de todo se sale… todo, menos lo único que no la tiene y lo único que nunca podrás olvidar. Cruzo los dedos a diario  pidiendo en silencio  no pasar por  trances inolvidables como esos,  y  día tras día mi vida me parece maravillosa precisamente porque los voy esquivando. Por experiencia sé que se tarda  mucho en aprender a vivir con  ello… y sin ellos…sin los que vas perdiendo por el camino.
 Estoy  acostumbrada a ver a  mi madre con cara de angustia permanente repitiendo: “Con todo lo que yo tengo encima…”Y yo,   por más que la miro, lo único que le veo encima, es el  pelo. Desagradecida con la vida.  ¿Y mi padre? El piensa que tuvo dos hijas sólo para darle disgustos cuando en realidad no recuerdo que ninguna de las dos haya matado a alguien. Ojalá algún día la vida no se tome  la revancha y decida enseñarles lo que es realmente  sufrir por algo.
Desde hace unos días,  alguien a quien quiero mucho, con la misma filosofía que yo, alguien que ya sabía valorar la vida sin que ésta viniera a darle un escarmiento para que  espabilara y empezara a hacerlo,  pasa por uno de esos momentos en los que no hay palabras de consuelo. Ojalá las hubiera.  Desde entonces no he vuelto a escribir nada. Hacerlo habría sido una falta de respeto hacia la Pilu comentarista, la Pilu esteticista de Casa Rural la Rosaleda. Y de “falta de rispetto” las dos sabemos mucho (vivimos con los creadores de la frase).
Por este  motivo me despido.  El blog se toma un descanso hasta septiembre…y entonces ya veremos…La vida a veces es una hija de puta integral...