Anoche estuve viendo la nueva comedia de Telecinco “La Vida Loca”. Me reí mucho pero  al mismo tiempo pensaba: “Pero si mi vida familiar da tanto o más juego que la de ellos”.
Constantemente y muchas veces sin buscarlo,   protagonizo sketch de las mejores comedias. Ejemplo para que juzguéis si serviría  para un guión.

Sábado por la tarde. Salón de mi casa.

Mi exmarido: “¿Dónde tienes las maleta que llevasteis a Zaragoza? Necesito que me las devuelvas. Quiero prepararlas para el fin de semana que me voy con Adriana a Santander (Aún faltan 15 días pero el tío tiene que empezar ya por si acaso…).

Yo: “La de Adriana está ahí en su habitación. Cógela tú, por favor”.

Mi exmarido: (la levanta). “Pero…pesa mucho. ¿Está llena?”

Yo: Es que…no me ha dado tiempo a sacar las cosas todavía”.

Mi exmarido: “Pero…si volvisteis hace 10 días”.

Yo: “Bueno hijo, así ya te la llevas hecha para el viaje. ¡Qué maniático!”.

Mi exmarido: “¿Y la otra?” (Agachado abriendo la maleta de Adriana para comprobar si le hacen falta más cosas)

Yo: (desde la cocina) “Dani, amor, está ahí, justo al lado de él. Dásela. Pero también está llena (mi exmarido llegados  a este punto se lleva las manos a la cabeza). Vacíala ahora para que se la pueda llevar”.

Dani se levanta del sofá a regañadientes, se coloca al lado de mi ex y levanta la maleta para abrirla.

Mi exmarido: “Déjalo. No te preocupes, ya me la llevo otro día”.

Dani: “No tío. La vacío yo ahora en un momentín”.

Yo: ¡¡¡Cuidado!!!Está  a…bier….t…aaaa.

Demasiado tarde. Toda la ropa sale despedida por encima de mi ex que todavía está agachado,  con tan mala suerte que lo último que sale disparado es el secador que como era de esperar,  no podía aterrizar en otro sitio que no fuera su  frente.

Dani: “Uy, estaba abierta.  Lo siento tío”.

Mi exmarido: (frotándose la frente). Ya lo he notado. Te dije que no era necesario.

Yo: (corriendo desde el baño). “Toma, toma, Frótate la frente con el Arnidol de las niñas (para los que no tenéis hijos os diré que es una barra de gel   milagrosa para los chichones. Su descubrimiento marcó el ocaso de las monedas de 100 pesetas).

Adriana: “Ahhhhhhhhhhh (esto es una mezcla entre grito histérico y lloro). ¡¡¡¿¿¿Qué le has hecho a mi padre???!!!

Llegados a este punto, yo ya estaba tirada por los suelos. Mi novio recogiendo toda la ropa desperdigada por el suelo. Mi exmarido tranquilizando a la mema de nuestra hija que gritaba como si hubieran disparado a su padre en la cabeza con un  Tomahawk.

Adriana: ¡¡¡Eres mala. Deja de reírte!!!

¿A cuántos nos os gustaría poder observar mi casa a través de un agujerito? “La Vida Loca” es muy divertida pero “Mi vida real” no tiene nada que envidiarle. En mi casa no necesitamos guionistas.