Y toda la culpa, es mía....

Por desgracia el Madrid perdió la liga. ¿A quien se le podría atribuir la culpa? Parece evidente que los jugadores lo hicieron bastante mal; A  lo mejor fue culpa de  Messi que nunca falla e incluso Pellegrini, que tiene los días contados, pudo tener algo que ver. Sin embargo, si os decantáis por alguna de estas opciones, os estaréis  equivocando. La culpa fue mía y si alguien tiene alguna duda os lo puede confirmar mi novio que a juzgar por la bronca que me cayó, os podría asegurar a ciencia cierta que yo misma metí los goles que le dieron el triunfo al Barça, me tele transporté y metí el del Málaga. Durante 90 minutos fui la reencarnación de Puskas.

Por miedo a perderse ese momento (histórico donde los  haya)  en el que el árbitro pita el comienzo del partido, salió de casa sin llaves. Los nervios le jugaron una mala pasada y no pudo encontrarlas. Los nervios y el pequeño detalle de que ni con un GPS sería capaz de encontrar nada en la vida…excepto las gafas…claro... porque si no ve el resultado que sale en la esquina de la pantalla.

Por no tener llaves tuvo que esperar 20 minutos en el portal a que yo llegara. Una falta de respeto intolerable e imperdonable. Y eso que corrí rauda y veloz con la  niña en brazos porque ya sabía que el Madrid había perdido.  A la pobre con la carrera se el cayó todo el contenido del bote de jabón para hacer pompas. Pero eso no tiene importancia…

Menos mal que Alonso puntuó y Nadal ganó la final. Si no todavía me acusan anoche del asesinato de Kennedy.