Cada día escucho con más frecuencia  que los niños de hoy ya no son como los de antes. “Antes ni te movías porque de la hostia que te daban…Ahora hacen lo que les da la gana”. Supuestamente los niños de antes comían de todo, obedecían a la primera, no daban un ruido y eran cariñosos. Quizás por eso antes procreaban como si no costara y ahora empleamos  en condones todo lo que ellos gastaban en darnos de comer. Pero… ¿Realmente han cambiado tanto las cosas? Yo recuerdo a mi madre dando voces y cagándose en nuestros muertos todo el día así que no tengo muy claro que esa teoría sea cierta…a lo mejor yo era una excepción…
Cuando era pequeña leía todo lo que caía en mis manos. Con 10 años casi se salieron los ojos de las órbitas leyendo el Amante de Lady Chatterley. Las hazañas pornográficas de aquel leñador me dejaron  tan traumatizada  que yo creo que por eso nunca me he tirado a un tío que llevara camisa de cuadros. Mis noches favoritas eran las de los viernes cuando  mi abuela me dejaba ver Anillos de Oro y después La Clave. Si junto al Balbín con la bruja avería de la que también era una ferviente seguidora, algunos entenderán todas las bobadas que campan a sus anchas en mi  mente.
Hace dos días tuve en mi casa a G, la hija de 8 años de mi amiga. Si la comparo  conmigo, me doy  cuenta que los niños de antes y los de ahora no somos tan diferentes. Ella dice cosas tan sabías como:

“Me encantan las conversaciones de mayores. Ahí es donde realmente aprendo cosas.”

“Me parece fenomenal que tu amiga sea lesbiana. Cada uno se acuesta con quien quiere.”

“Yo quiero que Iker sea mi novio.”
“¿Para qué quieres novio G. tan pronto?”
“Rosa, yo tengo mis necesidades igual que tú tienes las tuyas.”

“Quiero salir en tu serie. Por fa, por fa, por fa. Pero…si voy a tener  19 años, quiero que pongas la foto de una chica que sea divina. Déjame el google que voy a buscar.”

Chica de ojos verdes con pelo rubio y rizado.

“Jo, aquí no salen fotos.”
“Ya, G, es que con lo que tú has puesto sólo salen anuncios de contactos.”
“¿Qué es eso?”
…….. (Esto es mi explicación)
“Jajaja. Dani, Dani, mira lo que puse en Internet y salen anuncios de chicas. Jajaja.”

“¿Qué haces?”
“Estoy chateando.”
“Escribes muy deprisa.”
“Ya”
“¡¡¡Jo, lo haces adrede para que no me de tiempo a seguir la conversación!!!”

Esto es sólo un 10% de lo entretenidas y avispadas que son las niñas de ahora (Las ocurrencias de G. y la ironía de mi hija darían para escribir un libro).

Yo soy una niña de antes pero puedo presumir de no haber comido de casi nada hasta que cumplí los 25, de no dar besos a nadie (sigo igual de rancia), de intentar saltarme, siempre que podía,   las normas que me imponían. Ruido no sé si daba pero personalmente a mis hijas prefiero oírlas (cuando están calladas…malo). Y todo eso siendo una niña de antes y con una madre que no era precisamente la reencarnación de Mary Poppins.

Uy…dentro de dos años cuando G. lea El amante de Chatterley….