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Tener mucho dinero no siempre implica tener todo lo que a uno le gustaría. De eso hemos dado  fe en Las Redes del Valle  este fin de semana. Muchas veces hay que descender de los tacones de aguja de 12 centímetros para darse cuenta que los que menos tienen son los que menos necesitan.  Nuestro pueblo ha sido el escenario perfecto para mezclar a la jet set  con la España más profunda. El viernes llegaron las rubias pisando fuerte, y  el domingo no habían dejado  ningún prado sin desgraciar. Detrás de las rubias llegaron los paparazzi. Y ahí se armó. ¿Quién les avisó? En el salón de la Pilu otra vez colas interminables. Definitivamente va a ser el negocio estrella de la zona. “Pero…¡¡¡¡Viene la tele y yo con estos pelos!!!” Esa era la frase  más repetida en todo el valle. No me dio tiempo a contar cuantas veces las rubias visitaron la era en todo el fin de semana pero seguro que más de uno estará relajado durante días y ¿ellas? La rubia número tres, después de la experiencia se apuntará a Granjero busca esposa (la muy ilusa cree que los que van a ese programa son igual que nuestro cabrero particular). De la rubia número dos,  poco podemos decir. Si las camillas hablaran ya sería otro cantar. Y la rubia número 1 parecía Heidi. Todavía está cantando el aralerileriló…aralerileriró…En el pueblo todos nos alegramos, no por ella, pero si por nuestro adorado Macario que durante unos días olvidó a la Pilu y hoy las calles brillan más que cuando mi abuela daba cera al suelo del pasillo de mi casa con O´cedar.”
(48 horas antes)
Hernández: “Ya te había dicho yo que en el 11888 no te facilitaban el número de teléfono de ningún famoso.”
Fernández: “Pues vaya caca los Pelochos. Prueba éste XXXXXXXXX.”
Hernández: “Hola, buenos días. ¿Podría hablar con Karmenchu Márchele?”
Karmenchu: “Sí, soy yo. ¿Quién es? ¿Qué quiere? ¿Por qué me molesta?”
Hernández: “Le llamo de las Redes del Valle, un pueblo de la montaña de León. Tengo una información muy interesante sobre  tres mujeres del colorín,”
Karmenchu: “Identifíquese, por favor. ¿De qué famosas está tú hablando?”
Fernández: “Pregúntale cuando dinero nos va a dar por la información”
Hernández: “¿Cuánto dinero estima usted que vale el bombazo que le vamos a soltar?”
Karmenchu: “Pues si no me dice qué famosas son, muy poco. Además tendría que contrastar la información que luego me apedrearán las del gremio. Me tienen unas ganas las intrigantes esas.”
Hernández: “En nuestro pueblo hay una casa rural, La Rosaleda, y este fin de semana están disfrutando de unos días de relax 3 recién divorciadas, de esas para las que el divorcio ha sido un trauma que asciende a 6000€ de pensión compensatoria.”
Karmenchu: “Ya estoy en el coche. Repítame el nombre del pueblo que lo pongo en el GPS. Recojo a mi amigo Jesús Meriños y  nos presentamos allí en unas horas. No dejen que se vayan por favor.”
Hernández: “¿Cuánto nos van a pagar por la información?”
“%$($%&$(& no le oigo ()===&=(%(%$) se va la cobertura…PI…PI…PI…”
Hernández: “Me ha colgado. Ya sabía yo que era una agarrada. Corre Fernández. Vamos a adelantarnos. Hacemos las fotos nosotros y las vendemos por Internet. No sé para qué te hice caso.”
Fernández: “Tengo la digital en la oficina.”
(En la casa Rural La Rosaleda. 3 mujeres rubias se acercan a la recepción)
Doña Mercedes: “¿Puedo ayudarles en algo? Me suena su cara. Yo juraría que las he visto antes en alguna parte”
1ª Rubia (Patry Rotto): “Nos confundirá con otras personas. Queríamos saber cuándo podemos darnos un masaje. Hemos oído que cuentan con las últimas terapias de relajación. Estamos tan estresssadas. ”
Doña Mercedes:”Un momento. Llamo a Sebastián que es el encargado. Tanto él como su hija Isadora pueden darles el masaje que deseen.”
2ª Rubia (Liria Broster):”Yo quiero con él. He leído en el Men´s Health que es de los mejores fisioterapeutas que hay ahora mismo en el país”.
3ª Rubia (Nataly Chemin): “Tú lo que viste fue la portada de la revista y por eso nos has traído aquí. La verdad es que el sitio es divino, tan cool.”
Sebastián: “Hola buenos días. Esperamos que la estancia en nuestra casa sea de su agrado. Aquí tienen un folleto con todas las posibilidades que les ofrece nuestro spa. Estaré disponible todo el fin de semana para ustedes.”
2ª Rubia: “Yo quiero ya mismo. ¿Dónde tienen las instalaciones? Necesito cambiarme y ponerme cómoda.”
3ª Rubia: “Sí, hija, sí. Quítate la pamela. No creo que sea necesario tanto glamour. Ponte mejor una cinta de tenis.”
1ª Rubia: “He oído que su hija también trabaja con usted. ¿Podría darme ella un masaje? Tengo tanta tensión acumulada con esto del divorcio que me duelen músculos que hasta desconocía que tenía. ¡Qué contrariedad!”
Sebastián: “Ahora mismo viene. Ustedes acompáñenme”.
3ª Rubia: “Yo, si no le importa prefiero dar una vuelta por el jardín. He visto algún espécimen más interesante. (Se aleja)
Sebastián: ¿Quiere echar un ojo al folleto para elegir algo o tiene claro lo que le gustaría?
2ª Rubia: Noooo…si lo que quiero lo tengo muy claro pero no sé si lo encontraré en el folleto. Usted no se preocupe. Me pongo en sus manos para que haga lo que quiera.”
Sebastián: “Si me permite voy a experimentar con usted una de las últimas técnicas que he aprendido y todavía no me ha dado tiempo a poner en práctica.”
2ª Rubia: “Lo que tú quieras pero trátame de tú, por favor.”
(En el jardín)
3ª Rubia: “¡Yuju! ¿Eres el jardinero? Antes me pareció verte con los animales.”
Enrique: “Me encargo de las dos cosas junto con Almudena.”
3ª Rubia: “Voy a estar aquí todo el fin de semana. Si necesitas algún tipo de ayuda, sólo tienes que pedírmelo.”
Enrique: “Me vas a disculpar pero no te veo yo con mucho estilo para ordeñar cabras. Disfruta del spa.”
3ª Rubia: “Eso ya lo tengo en mi chalet de la Moraleja. Yo lo que necesito es algo más exótico.”
Enrique: Y, ¿Qué creías? ¿Que venías a Granjero busca esposa?”
3ª Rubia: “No te burles de mis inquietudes.”
Enrique: “Perdona. No era mi intención burlarme. Si quieres te invito a tomar una copa después. Hugo las prepara como nadie.”
3ª Rubia: “Ay, sí, un Manhattan ahora me vendría de perlas.”
(Doña Mercedes llega al jardín.)
Doña Mercedes: “Enrique. Tengo que hablar contigo.”
3ª Rubia: “Si quieren yo me voy. Pero no te olvides de las copas de después. Voy a refrescarme un poco.”
Enrique: “Dígame. ¿Qué ocurre?”
Doña Mercedes: “Se trata de Isadora. No aparece. No he querido decirle nada a su padre porque iba a ser mucho peor pero ya es tarde y esa chica…ya sabe…la otra rubia lleva esperando por ella más de una hora. Está empezando a ponerse nerviosa y ya no sé qué decirle.”
Enrique: “Voy a buscarla. Pero, no le digas nada a Sebastián. Mejor que siga trabajando. Y si puede, quítale la escopeta de su vista.”
(En la recepción)
2ª Rubia: “Oiga, oiga. ¿Cuándo me van a dar el masaje? Estoy súper aburrida.”
Enrique: “Vuelvo en un rato con la masajista. Le compensaremos. Discúlpenos por favor.”
2ª Rubia: “¡Jolina! Y tú, ¿De dónde vienes?”
3ª Rubia: “De arreglarme la noche.”
(Llegando a casa de Mathias)
Enrique: “Esta hija nuestra va a acabar con mis nervios. Seguro que está aquí con el Picasso ese de tres al cuarto. ¡Isadora, Isadora!
Mathías: “¿Qué ocurre? ¿Por qué grita de esa manera? Estaba haciendo meditación en el jardín.”
Enrique: “¿Isadora no está contigo?”
Mathías: “No la he visto desde ayer. ¿No está en la casa con ustedes?”
Enrique: “Pues la verdad es que no. No he querido decirle nada a su padre pero esta mañana ya no la vi en el desayuno y pensé que habría salido.”
Mathías: “Me está usted preocupando. Y encima ya estoy viendo al de la escopeta corriendo por el monte  y estará convencido de que la culpa la tengo yo.”
Enrique: “Gracias por todo. Vuelvo a la casa. Tendré que avisar a su padre. Si supiera algo o viniera a buscarle nos llama inmediatamente.”
(De vuelta en la casa)
Doña Mercedes: “¿La has encontrado?”
Enrique: “No, no estaba donde yo pensaba. Voy a avisar a Sebastián y saldremos a buscarla.”
Gabriela: “Si estáis buscando a Isadora no os preocupéis. Ha salido esta mañana a comprar algo importante para ella.”
Enrique: Y, ¿Por qué no ha dicho nada?
Gabriela: “Porque no la habríais dejado ir. Tú no sé pero Sebastián…ni de coña.”
Enrique: “Y, ¿Cuándo piensa volver?”
Gabriela: “Antes de anochecer. No te preocupes por ahora.  Preocúpate cuando veas lo que ha ido a comprar.”
Enrique: “No sé si quiero saberlo.”
Gabriela: “Las sorpresas son más divertidas. Me voy que he quedado con Rodrigo. Dame un beso y vete calentándole una tila a Sebastián aunque por lo que he oído en el spa ya está bastante relajado, 3 veces relajado para ser más exactos.”
Enrique: “Gabriela, un poco de respeto con el padre de tu hermana.”
Gabriela: “Si a mí me parece estupendo. A ver cuantas veces te relajas hoy tú con otra de las rubiales. Que te tiene unas ganas desde que te vio ordeñado las cabras…”
Enrique: “Sólo he quedado para tomar una copa.”
Gabriela: “Eso mismo te voy a decir yo dentro de un par de años. Voy a tomar unas inocentes copas.”
Enrique: “Vais a acabar con nuestros nervios. Eso es lo que vais a hacer tu hermana y tú”
Gabriela: “Vamos, que vosotros sois los cochinos que os tiráis a todo bicho viviente y nosotras somos las que os damos quebraderos de cabeza. No…si va a ser verdad que cree el ladrón que todos son de su condición. Hasta luego papá. Te quiero muchísimo pero mira a ver donde vas con ella que Doña Mercedes después tiene pesadillas durante semanas  y no me deja dormir.”
FIN DE LA PRIMERA PARTE….
En la siguiente parte contaremos lo que sucede finalmente con las rubias antes de su salida del pueblo y nos enteráramos de qué ha comprado Isadora para desgracias de sus “padres”.